SER...Y PARECERLO

Los jueces tienen que ser independientes, pero tienen también que parecerlo. Como lo de la mujer del César. ¿Se imaginan Uds. a un árbitro de futbol de francachela con los directivos de un club?.
Viene todo esto a cuento de la deprimente impresión que me causó , el día que toreó J. Tomás, ver a la presidenta de la plaza de Sevilla, Anabel Moreno, en el callejón de la plaza de Olivenza intercambiando chanzas y risas con el taurinismo rampante.
¿Qué pintaba esta señora en el callejón?, ¿quién la invitó?, ¿pidió ella el “convite” ?.
Mal si se dejó invitar por algún taurino que puede pedirle la devolución del favor cuando esté en el palco. Peor si se hizo invitar prevaliéndose de su condición de presidenta de Sevilla. Y en cualquier caso, muy poco elegante no tener la elemental discreción de irse al tendido, aunque fuera con un “convite”.
Sra. Presidenta, aunque parezca haberlo olvidado, Ud. está en el palco para defender a los aficionados y al público, es Ud. el árbitro entre ellos y los taurinos. Y como decía al principio: debe ser independiente y parecerlo.
Yo comprendo que la vida está muy mala, que a nadie le amarga un dulce y que es muy tentador ahorrarse dos entradas…
Pero por favor! Por respeto a la plaza de Sevilla, por respeto a su público…por respeto a Ud, misma, un poquito más de elegancia, un poquito más de discreción y un poquito más de independencia. Por el bien de la fiesta y por su propia imagen.
Por último Sra., créame si le digo que no la culpo del todo. Estoy sinceramente convencido de que está muy mal asesorada por quién la nombró y por quienes la rodean.